Siempre he asumido mi falta de experiencia a la hora de dibujar, quizás sea porque nunca lo he intentado con esmero, quizás sea porque siempre he pensado que tienes que tener un don especial para ello.

Nunca pensé que el dibujar se pareciese tanto al habla. ¿Cómo dibujar las palabras que tu cabeza bombardea constantemente?. Imaginad vuestras palabras saliendo de vuestra boca como una línea que un lápiz surca por un folio en blanco. Sí, tienes una goma de borrar, pero cómo borrar las palabras que ya se han dibujado?, ¿cómo darle forma exacta?. Quizás dibujar sea cuestión de dejarse llevar, de dejar que se dibujen los pensamientos como si de un artista se tratase.

Quizás sólo sea cuestión del que observa el dibujo, del que recibe dichas líneas hasta transformarlas en aquello que tú, y sólo tú, quieres transmitir. Me asusta la idea de que nunca pueda llegar a dibujar a la perfección, pero quién puede aparte de los que poseen el don?.

Con estos pequeños "dibujos" quiero transmitirte a ti, mi niña, que nunca temas dibujar, pues el que recibe y observa tus dibujos es alguien que conoce tu obra a fondo, y que lo único que espera de ti, es que cada día le sorprendas con un nuevo boceto que se transformará en obra de arte. Estaré a tu lado para ver cómo creces como artista.